INTRODUCCIÓN
La electroestimulación funcional es una técnica que fue traída al país
por médicos fisiatras en la década del 80. El referente en nuestro país sin
duda alguna es el Dr. Sotelano.
Su sigla en inglés es F.E.S. (Functional Electrical Stimulation) y su
traducción al español E.E.F., Electroestimulación Funcional.
La misma consiste en utilizar N.M.E.S. (Neuromuscular Electrical
Stimulation) para entrenar y/o reemplazar una actividad funcional alterada o
perdida.
Si bien esta técnica puede realizarse con corrientes convencionales hoy
en día disponemos de estudios científicos que pautan los parámetros más
adecuados.
El propósito de este trabajo es dar una guía informativa rápida de sus
posibles aplicaciones, parámetros y desmitificar el uso de electroterapia en
lesiones centrales.
BASES TÉCNICAS Y NEURO-ELECTRO-FISIOLÓGICAS
La corriente utilizada para esta técnica, N.M.E.S., implica que debe estar
indemne el nervio periférico, o sea que es aplicable solo a lesiones centrales.
En ellas podemos incluir a lesiones de cerebro, tronco, protuberancia, bulbo y
médula espinal (se excluyen las lesiones de asta anterior).
Esto se debe a que la N.M.E.S empleada para F.E.S. posee un ancho de
pulso de 50 hasta 760 us (microsegundos; 1 x 10 -6 segundos) y si recordamos
los valores de cronaxia para tratar una lesión periférica se encuentran por
encima de los 30 ms., valor que logra despolarizar la totalidad de las fibras
lesionadas.
Cuando no existe lesión nerviosa se requerirá menos intensidad para
despolarizar al nervio ya que su potencial de membrana en reposo es de - 70 mV.
y su umbral de despolarización - 55 mV, lo que hace que una diferencia de
potencial de 15 mV. logre la despolarización.
Los parámetros técnicos a utilizar son:
• Tipo de corriente: Rectangular bifásica simétrica de baja frecuencia. Esta
forma de onda no posee efectos galvánicos por lo que evitamos por un lado el
riesgo de quemaduras cutáneas químicas, sobre todo cuando el equipo es
utilizado durante horas para reemplazar una ortesis. Hasta el momento nos
encontrábamos empleando corrientes unidireccionales o bien ondas tipo TENS,
espigadas no compensadas lo que traía irritaciones cutáneas, fenómenos polares
que perjudican la ganancia de fuerza (la vasoconstricción, por ejemplo), menor
fuerza de torque y menor tolerancia. En cuanto a que son de baja frecuencia si
bien tenemos un incremento de la impedancia de los tejidos, estudios de
investigadores como Yocheved Laufer et. al. y, Coarasa Lirón de Robles et. al.,
han demostrado una mayor tensión isométrica con corrientes de baja frecuencia y
una menor fatiga que con las de media (Rusas e Interferenciales).
• Ancho de pulso: Dependiendo el estado neuromuscular variará y es factible que
sea necesario utilizar tiempos levemente superiores a un músculo normal.
Habitualmente se emplean tiempos comprendidos entre los 200 y 400 us.
Recordemos que a mayor ancho de pulso se estimulan las fibras A-Delta y C
(transmisoras del dolor), situación que debemos tratar de evitar.
• Frecuencia: 25 – 30 Hz. Son consideras frecuencias subtetánicas y estimulan
las fibras Tipo I o lentas. La elección de esta frecuencia se debe a que en un
paciente con estas características lo último que se quiere es fatigar un grupo
muscular sobre todo si sus antagonistas son los denominados “fuertes"
Vemos aquí un gráfico de tensión isométrica en relación al tiempo y a las
distintas frecuencias empleadas en los extensores de muñeca:
• Rampas: Hasta hace muy poco los equipos de E.E.F. no poseían rampas,
ocasionando un gran disconfort al paciente y la aparición de reflejos de triple
flexión. Otros equipos si bien la poseían no era factible su regulación
independiente de los tiempos, lo que implicaba trastornos por ejemplo, al
reemplazar la función de dorsiflexión de pie durante la marcha. Hoy en día es
factible el empleo de equipos totalmente programables mediante computadora.
• Meseta: Sus valores son prefijados en los equipos más avanzados
dependiendo de la actividad a desarrollar o bien el propio paciente a través de
un pulsador la define, finalizando y comenzando la estimulación según lo
requiera.
• Accesorios: Otro factor a tener en cuenta es el uso y en algunos casos la
creación de accesorios para lograr función durante las actividades para cada
paciente en particular, lo que no solo requiere de la imaginación del
profesional si no también del apoyo de ingenieros especializa.